domingo, 13 de marzo de 2005

11-M. ONCE MIRADAS.

11-M.

RESEÑA.- 11-M. Once miradas, Edicions de Ponent / Patronato de Cultura del Ayuntamiento de Guadalajara, 2005. Coordinación: Felipe Hernández Cava. Autores: Ana Juan, Bartolomé Seguí, El Cubri, Enrique Flores, Felipe Hernández Cava, Keko, Laura, Micharmut, Raúl, Santiago Sequeiros, Silvestre, Victoria Martos. Libro de historietas en cartoné, 80 págs., b/n, 30 euros.

Los brutales atentados del 11 de marzo de 2004, además de dejar un saldo de 191 víctimas mortales y más de 2.000 heridos, y de servir para que ciertos dirigentes políticos se ratificasen en sus postulados respecto a la "guerra contra el terrorismo", generaron una gran movilización en la sociedad española. Al día siguiente, millones de personas nos echamos a la calle bajo la lluvia para, por un lado, compartir nuestro pesar con quienes habían sufrido las consecuencias del horror en carne propia (o en la de familiares y amigos) y, por otro, para intentar explicarnos a nosotros mismos qué había ocurrido la víspera. El álbum colectivo 11-M. Once miradas, coordinado por el guionista Felipe Hernández Cava, responde a muchas de las inquietudes planteadas en aquellas jornadas.


En esta espléndida obra, de lo mejor que se ha publicado en España durante los últimos años, once historietistas se ponen al servicio de la reflexión para ofrecernos su punto de vista sobre la masacre. A la manera de un mosaico, cada uno de los relatos que componen el libro ofrece una perspectiva distinta (la de las víctimas, la de sus allegados, la de los verdugos)... Pese a la diversidad, todas las piezas coinciden en un mismo punto: la necesidad de situar la ética en el corazón de la historia, iluminando así la tiniebla moral en que nos sumió el odio de unos pocos fanáticos; en este sentido, creo yo, hay que interpretar el que la luz se enseñoree de las planchas de Laura y Silvestre.

Además de rescatar a autores que, como Raúl o El Cubri, se habían apartado de la historieta en los últimos tiempos, este álbum nos proporciona, a mi entender, una tabla de salvación en momentos de "deriva democrática" (concepto sobre el que tanto ha insistido el ensayista José María Ridao). Con este magnífico libro, la historieta española se ha procurado un instrumento con que aportar algo de luz a un mundo que parece hundirse progresivamente en la oscuridad.

Reseña de: Jorge García.

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