A finales de 1983 apareció en Canarias un fanzine que estaría llamado a ser nexo entre el pasado y el presente del fanzinismo en España. Era Camello. El antetítulo "un fanzín llamado"(Camello) pecaba de modesto. No le hacía justicia. Camello fue más que un fanzine, fue una publicación con obras de neófitos pero tambien de autores profesionales o de firmas que pronto darían el salto a la profesionalidad.
Hagamos un viaje por sus páginas. Hallaremos firmas como: Juan flops (que es, nada más y nada menos que Juan Fernando López Aguilar, actualmente político socialista que se presenta a las europeas dentro de una semana), Andrés Sopeña Monsalve (el profesor de derecho y exitoso escritor de El florido pensil), el gran Jesús Blasco, Azpiri, Juan Espallardo, Victor Barba, Isaac del Rivero Jr., Rafa Negrete, Chipola, Das Pastoras, Jesús Merino, Rafael Cid, Sebas, Algar, Corbacho..., más los valores locales, muy destacables algunos (Manrique era buenísimo). También contuvo textos de Manuel Darias, Rafael Marín, Muñoz Zielinsky, Carlos Saiz Cidoncha... Y, agárrense, historietas de grandes autores internacionales, inéditas por entonces, y convenientemente traducidas, entre ellos: Winsor McCay, Frank Frazetta, Gil Kane, Len Wein, Michael Wm. Kaluta, Rosinski y Duchateau, Juan Zanotto, Donne Avenell, Badía Romero, Vaughn Bodé, Hermann...
En fin, un tebeo de los que había que catalogar (sobre todo en un día como hoy) para que no se escurriese por los entresijos de la historia del olvido (que cada día es más vasta), de lo cual se han encargado el divulgador canario Luciano Díaz, que nos ha proporcionado la indización completa y una contextualizacion de la publicación, más los afanosos tebeditores de Tebeosfera: Manuel Díaz Bejarano, Antonio Moreno, Juan Manuel Bosque Sendra y M. Barrero.
Tebeosfera. La mejor labor de documentación; aunque sin premiar.
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