LA SOMBRA DEL CÓNDOR

Manuel Barrero reseña la primera entrega de la serie La sombra del cóndor, titulada 1936. Bajo un un cielo español. Un tebeo bélico, melodramático y de aventuras del argentino Gerardo Balsa, con una cuidada ambientación durante los inicios de la Guerra Civil española, publicado recientemente por Trilita:
LA GLAMUROSA SOMBRA DEL CÓNDOR

Tebeosfera. Tebeos de altos vuelos

INTRANSEXTELLAR

Manuel Barrero reseña el cómic Intransextellar de Jimi Macías, opera prima deslumbrante visualmente que invita a la reflexión sobre el mensaje:
INTRANSEXTELLAR. UNA FICCIÓN PELIGROSA BELLAMENTE DISEÑADA

Tebeosfera. Tebeos trans

SUPERMAN VUELA LIBRE

Los superhéroes llevan visitando la gran pantalla muchos años. Se engañan quienes piensan que los tipos con superpoderes están triunfando en los cines desde hace poco, porque lo cierto es que llevan ya casi un siglo (si contemplamos la posibilidad de que el primer superhéroe fuese Popeye, cuya primera película se estrenó en 1933). Precisamente, los estudios que dieron vida en celuloide al personaje de E. C. Segar fueron los Fleischer Studios, que en 1941 lanzarían un serial cinematográfico protagonizado por Superman, considerado por todos como el superhéroe por antonomasia.

En el presente número de Tebeosfera, dedicado a los españoles que trabajaron para los mercados exteriores, hemos incluido algunos textos en la sección de miscelánea que merecen ser divulgados, como es el caso de este ensayo de Carlos Rodrigo Pascual sobre las primeras apariciones animadas (y en cine) del mayor mito de los cómics. Lean cómo aprendió a volar aquí:

SUPERMAN SE ANIMA Y VUELA

Tebeosfera. Animados con la historieta.

EXPLOSIÓN DE AUTOEDICIÓN

Los festivales de cómic ya no son únicos y ya no son solo de cómic. El fenómeno de la autogestión editorial también existe desde hace mucho tiempo, pero en estos últimos años está viviendo un nuevo auge que genera gran ilusión por conocer lo más nuevo y los hallazgos de los espíritus más jóvenes.

Nuestro corresponsal Dani González estuvo en el último Kboom! y nos cuenta cómo lo vivió:

KBOOM! 2019

ACyT. Autotebeos.

CIENTÍFICOS LOCOS

¿Es curioso, verdad? Tenemos grabada a fuego la imagen del "científico loco" en nuestro imaginario. Todos sabemos lo que es. Un ser inteligente, cultivado y creativo que decide utilizar sus conocimientos y su talento para hacer el mal (todo lo cual le vuelve feo, por supuesto). Suele ser el villano que se enfrenta al héroe en los cómics y por eso, en parte, la idea que adquirimos de la ciencia es que resulta peligrosa. Y decía lo de curioso porque en realidad muchos héroes que adoramos son también científicos (Batman, Spider-Man, Iron Man, etcétera), claro que ellos no son feos.

Blanca Mayor Serrano analiza esta cuestión y trata de darle la vuelta en el presente artículo, reconociendo el estereotipo generado por los medios populares y proponiendo ideas para modificar esa imagen al mismo tiempo que promueve vocaciones en los jóvenes estudiantes.

EL CÓMIC DE CIENCIA COMO HERRAMIENTA

Tebeosfera. Tebeos con/ciencia.

ÁNGELES DE TEBEO

Víctor Mora y Víctor de la Fuente fueron dos autores españoles que tuvieron éxito en la industria franco-belga durante loa años setenta y ochenta. Mora se había especializado en la aventura, género en el que se movía como pez en el agua, y De la Fuente se había convertido en un narrador gráfico excepcional, perfecto para el relato aventurero. Lo interesante de su obra juntos es que satisfacía al habitual consumidor de aventura, transportado a escenarios históricos (o supuestamente históricos) perfectamente retratados y con un interés añadido: la crítica soterrada a los sistemas autoritarios.

Les anges d'acier es una serie de ambos que se ambienta en un lugar imaginario durante los años treinta y contiene todos los elementos característicos de la aventura de entreguerras. Jesús Duce, gran conocedor de la obra de ambos autores, nos contextualiza y comenta esta serie en la siguiente reseña:

DE VÍCTOR A VÍCTOR

Tebeosfera. La aventura tiene alas.

AL OTRO LADO DEL ESPEJO

Fue difícil colocar relatos propios, "obras de autor", en el extranjero a través de los mercados de agencia. Lo logró Víctor Mora en Francia, lo consiguió Enric Sió en Italia, también Miguel Cussó, y Jordi Bernet en Alemania, y en Estados Unidos lo hizo Josep M. Beà. No fueron los únicos, pero sus trabajos podrían ser calificados de modélicos solo por esa razón.

Peter Hipnos fue la serie que ideó Beà. No es de sus mejores trabajos como historietista pero sin duda lleva su descarada impronta: un relato inspirado en las fábulas y la novela infantil decimonónica que trasciende lo fantástico para ir más allá de lo macabro, hasta lo surrealista. O aún más lejos, hasta lo subconsciente. Manuel Barrero cree haberlo visto así y lo cuenta en esta reseña:

PETER HIPNOS EN EL PAÍS DE LAS DEFORMIDADES

Tebeosfera. Cómics que hipnotizan.

UN ESPEJO EN EL TIEMPO

Jesús Gisbert, hombre que sabe de tebeos tanto como de filosofía, se detiene en un elemento de la obra Las crónicas del Sin Nombre (Mora y García, 1973) en el que antes no se había escarbado lo suficiente: el tiempo. Este magnífico tebeo plantea dramas humanos, sociales y fantásticos sitos en diferentes emplazamientos (y géneros), y el nexo común que los une es un ser innominado que salta de personaje en personaje. ¿Es ese ser una entidad como el llamado Eternauta? ¿Es una excusa para aglutinar varios guiones de wéstern, terror, costumbrismo, ciencia ficción y fantasía en un mismo lote? ¿Qué es?

La respuesta podría estar en la reseña que hemos publicado sobre esta obra, una de las más reconocidas entre las producidas por autores españoles para la industria francesa en los años setenta.

LAS CRÓNICAS DEL SIN NOMBRE, UN ESPEJO EN EL TIEMPO

Tebeosfera. Tiempo de tebeo.

LA DISIDENCIA SOLAPADA

Enric Sió fue uno de los más grandes creadores de nuestra historieta, pero se vio obligado a publicar parte de su obra en Italia o Francia. Aparte de lo mermado de su industria en el final de los años sesenta, España se le quedaba pequeña para todo lo que el autor quería representar o para todo lo que quería contar. Aghardi, su obra más recordada, surgió al poco de sorprender a todos con Lavinia 2016, pero decidió presentar su nuevo trabajo a un editor italiano, no a uno español. Lo hizo acertadamente: cuando llegó a nuestro país, su primera versión apareció mutilada.

Héctor Tarancón revisa esta obra, y su repaso aclara algunas de las dificultades que tuvieron nuestros autores para imponer sus criterios en la España de los años sesenta y los primeros setenta.

AIRES DE VANGUARDIA EN AGHARDI

Tebeosfera. Vanguardia y viñetas.
(la imagen es uno de los diseños previos preparados por Editores de Tebeos para el rescate de la obra)