La historieta italiana se ha caracterizado por sus formatos asequibles y por su abuso de los géneros. Si en los setenta fue una industria que potenció el erotismo cómico en los fumetti en los ochenta siguió con esa tendencia en sellos como Edifumetto, donde el director Renzo Barbieri puso la salsa picante a lo largo de la década, y logró exportar estos productos a otros países de Europa.Muchos de esos tebeos fueron traducidos al español en publicaciones del sello Zinco, el mismo que publicaba lo mejor de los superhéroes de DC Comics a la misma altura de los años ochenta. Hoy traemos aquí dos fichas de esas colecciones, con buenas dosis de acción y sexo, y que son de difícil catalogación precisamente debido al escaso valor que le suelen conceder los coleccionistas por sus contenidos, a veces zafios y por esta razón minusvalorados.
Por fortuna, nuestro nuevo colaborador Alberto Basarte no hace remilgos a estos tebeos, que a la postre resultaban un divertimento sin pretensiones, y el resto de los aficionados podemos tener acceso a una mirada objetiva sobre ellos, necesaria porque también forman parte de la historia de la historieta y de nuestra tebeografía:Tebeosfera. Somos serios, catalogamos todo.
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