Robert Kirkman, como algunos de los guionistas de la última década, se ha destacado por la utilización de bases argumentales ya ensayadas que ha sabido remozar a través de la parodia y sobre la base de un buen manejo y conocimiento de los resortes del entretenimiento.
Kirkman no inventaba nada cuando creó The Invincible en 2002, puesto que el mito del alienígena superpoderoso que protege nuestra Tierra ya estaba en los tebeos desde 1938. The Walking Dead, serie de miedo que Kirkman lanzaba en 2003, era una vuelta de tuerca de género de zombis. The Astounding Wolf-Man, de 2007, consistía en la enésima revisión del mito del licántropo. Brit, héroe de 2003 también, parecía un trasunto del supersoldado que los cómics americanos ya incorporaron a la cuatricromía en los años cuarenta, pasado en este caso por el filtro del antihéroe pendenciero de los ochenta, aquel tipo invulnerable que envejecía lentamente.
Hoy revisamos dos tebeos de la factoría Image publicados por Dolmen en España, dos tebeos sobre héroes aparentemente poco originales para construir nuevos universos superheroicos que desmenuza nuestro colaborador Rafael Ruiz Dávila con gran acierto y perspicacia.
EL UNIVERSO IMAGE
CUANDO LA PARODIA SE VUELVE OBRA PER SE
Tebeosfera. Un universo de imágenes.
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