Los cómics de EC han sido invariablemente leídos con referencia a su confrontación con los poderes públicos y con el demonizado Fredric Wertham frotándose las manos al fondo.
Pero puede hacerse otra lectura de estos cómics, una que mire también de forma distinta su simbolismo de los cómics como producto identificado con los males de la adolescencia, que calibre si su calidad era tan buena como siempre se dijo o que identifique algunas historietas que han envejecido mal.
Antonio Santos ha hecho una reseña crítica de estos cómics con la escopeta cargada (por si los espectros vengativos apellidados Wertham).
Tebeosfera. Cada mirada, un enfoque.
Sin ánimo de polemizar: "escopeta cargada", sí, y llena de expresiones que se me antojan algo gratuitas puestas, no sé si a propósito, para herir según qué sensibilidades. Por la parte que me toca, esa alusión ambigua y como de pasada al judaísmo de los editores de cómic de la época, o esa triste y demasiado vista asociación entre judío y dinero a propósito de Steven Spielberg, no sé si son demasiado afortunadas. Se podrá argumentar que no hay segundas intenciones, pero no creo que haya disculpa, entonces, para la falta de empatía. Esperaba, por lo demás, leer algo sobre unos comics que he admirado por ellos mismos, y me he encontrado con un panfleto bastante parcial y relleno de pullas para quien se deje inflamar por ellas. De todos modos, reitero mi enhorabuena a la labor de Tebeosfera; si no otra cosa -que también-, pluralidad.
ResponderEliminarUn abrazo y jag sameaj.
Así es, pluralidad.
ResponderEliminarLa opinión de Santos apunta hacia la escandalera que se montó en EE UU con un puñado de tebeos que, en gran medida, no eran "censurables" (fueron otros los títulos que publicaron violencia exagerada, y EC fue la que cargó con el muerto, metáfora que viene al pelo aquí). Santos deseaba subrayar que Wertham era uno de aquellos "demócratas" implicados en la cruzada y que fue demonizado, pues no fue el culpable principal.
Es obvio que Santos ha utilizado en este texto digresiones y expresiones que no vienen al caso, y yo tampoco estoy de acuerdo con algunas, con esa mención a Spielberg, ni con la presencia de Obama en el texto, pero hemos querido primar la libertad del autor frente a una rígida política editorial en aras de la pluralidad.
Que no todo va a ser repetir los mismos esquemas constantemente.
Vamos, digo yo.
...
Gracias por manifestarte, "hombre lobito", por el momento eres "el" lector de Tebeosfera, a juzgar por los comentarios que recibimos en nuestro blog (en realidad sois 52.136, pero no comentan; son cosas que tiene la interné).
Felices días.
Manuel, gracias por contestar. Comparto sin reservas tu criterio editor que, por lo demás, quizá haga que los artículos que a mí me parecen realmente dignos de excelencia -el del tío Berni para estos mismos comics, por traer uno reciente, es como para quitarse el sombrero, de nuevo mi enhorabuena- se destaquen todavía más respecto a otros que, por la susodicha pluralidad, igualmente entran, pero que quedan, en mi modesta opinión, muy alejados. Igualmente, entre unos y otros se compone un mosaico, perdón por reiterar, no sólo plural, sino que forma un auténtico reservorio de información -y opinión- indispensable para aficionados y estudiosos que, creo, era más que necesario.
ResponderEliminarGracias de nuevo, Manuel, a ti y a todos los editores y colaboradores de la página.
Abrazos y shlm.
Estimado Werewolfie:
ResponderEliminarEn lo que valgan, te presento mis disculpas. De veras que nunca he pretendido insultar a los judíos y en ningún aspecto. He conjeturado ciertas cosas, quizás aventuradamente, sobre una visión (creo) que traslada la TV y el cine norteamericanos al resto del mundo (ya sabes, las bromas en “Seinfeld” o “Frasier” sobre lo kosher y lo no kosher, por ejemplo) y, sobre todo, de una época como la que trataba el material reseñado. Voy a exponerme un poco más a tu crítica, pero Stan Lee es un cristiano viejo, ¿no? Y ese señor es, o era, un editor de cómics, ¿eh? Gaines y Feldstein, ¿qué eran? El editor de DC Comics también era otro con castizo apellido toledano, me parece. Vale, ironías aparte: a eso me refiero: editores con ciertos apellidos y procedentes de un determinado grupo de población. Nada más. No he pretendido faltar. En todo caso, te reitero mis disculpas. ¿Las aceptas?
Por cierto, Stephen King suele exponer puntos de vista como este en sus novelas. Otro ejemplo: recuerdo una escena de "Quiz Show", cuando al fiscal que investiga el tongo lo convocan en un clasista club (al parecer, de "rancio abolengo" protestante, otro de esos tics "Stephen King") y le preguntan si quiere un "sandwich Ruben (o Reuben)" y él contesta: "Pocos Ruben (o Reuben) veré por aquí", o algo así, y en alusión a la exclusión de los judíos en tan selecto club. Al juicio u opinión que esos sujetos emitían sobre los otros. Grosso modo, esa era la escena. Compréndeme: suelo trabajar sobre ese tipo de referencias.
Spielberg: que utilice el símbolo del dólar es en atención a su “toque de Midas”: ¿o acaso no vinculan su nombre al de prosperidad? Popularmente, el $ establece igual analogía. Pero, en atención a la asociación que estableces, de ahora en adelante, lo elimino.
En relación con el actual Sr. Presidente de los Estados Unidos, lo empleé como una referencia del "exponente moral, intelectual y ético" que se supone que es el demócrata norteamericano según la entienden en Europa ciertos sectores, políticos y de opinión. Al menos, así me lo “han vendido” ciertos medios de comunicación. Wertham era otro demócrata, que no obstante parece que lo habían escupido del III Reich, o algo así, un malvado de “Marathon Man”, y estamos viendo que incurrió en actitudes muy impropia de esos "preceptos" que he entrecomillado para destacarlos, conductas propias del republicano (más severo, menos transigente) Joseph McCarthy. Personalmente: “Nobel Para Bellum” es un título adecuado. Su grandeza hubiera sido mayor si hubiera declinado el premio, que se lo han concedido por razones “cosméticas”, ¿sí?
En cuanto a mi opinión personal sobre el material EC: admito su valor histórico, así como el légamo creativo que ha supuesto, pero, para mí, las historietas que hasta ahora llevo leídas no justifican su leyenda. Pero esto es ya cuestión de gustos personales.
Confío haberte convencido de que no llevaba aviesas intenciones con mi trabajo, esperando disipar esta polémica sobrevenida. Y gracias por leer mi reseña.
Atentamente,
Antonio Santos.
Antonio:
ResponderEliminarEn estos momentos tengo que salir, así que ahora mismo no puedo responder como merece tu propia respuesta. Más tarde volveré a entrar en la página y lo haré con la extensión que, creo, merece. De todos modos, avanzo lo principal: no sólo acepto tus disculpas, sino que ahora siento que soy yo quien debe darlas. Lamento haber sido tan nociva en mi crítica a tu artículo, vista la excelente justificación y matización que acabas de darle; de haber tenido esto en cuenta, mi actitud hubiera sido muy distinta, sin duda, y ahora me hace avergonzarme un tanto de mis palabras. Espero que tú también sepas disculparme, pero espero poder dar mis motivos para que tú también comprendas los motivos de mi aprensión.
Una última cosa. Creo que es la primera vez, que yo recuerde, en el que en un caso similar (de artículo "polémico" y críticas al mismo), el autor del artículo se muestra tan abierto y dialogante al respecto. Eso, creo, dice mucho a tu favor, y espero que cuando haya dado mis propias razones alcancemos un entendimiento común, algo que, en una "discusión internetera", hasta ahora consideraba poco menos que una entelequia.
Si antes tenía pocas dudas del criterio de Manuel Barrero a la hora de escoger a sus colaboradores, ahora tengo menos todavía. Me quito, simbólicamente, el sombrero ante ambos.
Más tarde sigo. Mientras tanto, un abrazo y shalom aleichem.
De vuelta. Sigo, pues.
ResponderEliminarA ver. Sobre los chistes y bromas a costa de los judíos, es muy cierto que nosotros somos los primeros en hacerlos (lo del humor y la autoparodia es casi una institución, desde Woody Allen a Sacha Baron Cohen, por citar un par bien conocidos; mi rabino conoce literalmente cientos de chistes judíos, y no se "corta" a la hora de contarlos). Ahora bien, no es lo mismo la autoparodia que el "chiste desde fuera". No por nada, no es que seamos tabú ni sagrados ni nada por el estilo; la culpa, y creo que esto no es difícil de entender, la tiene, digamos, la Historia. Y la propia actualidad.
Reconozco que alguna vez salto ante algunas alusiones que quizá sean inocentes (es el caso). Pero es que ya dicen que "gato escaldado del agua fría huye", y una ya está un poco, no sé si cansada o en parte de vuelta, de insultos, amenazas y cosas peores vertidas en los foros y páginas de internet más peregrinas. Recuerdo haber leído en los comentarios de un prestigioso periódico nacional -versión digital- a alguien que echaba la culpa a los judíos de todas las guerras durante toda la historia (literalmente), y terminaba deseando que ojalá nuestros antepasados se hubiesen ahogado cruzando el Mar Rojo (haciendo referencia al conocido episodio de cruce del mar huyendo de los egipcios, cuando, se dice, H' separó las aguas). Es un ejemplo que parece exagerado, pero como éste hay muchos (no hará falta que dé más prueba de esto, supongo). Yo no leo mucho en los lugares donde se suelen decir cosas así -y mucho menos comento-, pero justamente en un ámbito que para mí es algo así como un remanente de tranquilidad, el de los comics, siento como si tuviera que protegerlo de "agresiones" de tipo más o menos antisemitas -o judeófobas-, que por lo demás y por motivos más o menos obvios son, afortunadamente, rarísimas. Dicho de otro modo: en las webs y blogs de tebeos no espero encontrar a nadie que me desee, por el simple hecho de tener unos ancestros determinados, nada malo (que me acusen por "hacer", habrá que buscar motivos, pero por "ser", sin más, no me parece justo).
Todo este rollo viene ya casi como offtopic, ya que entiendo ahora que las alusiones que me habían molestado en el artículo no iban con segundas. Pero espero que, como decía, puedas empatizar, Antonio, con mi postura, y entender por qué en parte estoy en este tema "a la que salta". Nada más lejos por mi parte pretender que se "respete" a los judíos como si fueran cosa sagrada o algo así; al contrario, las críticas fundadas a, por ejemplo, determinadas actuaciones del estado de Israel -si vamos a ello- me parecen a veces cuando menos razonables. Pero cuando pasamos de la crítica a las acciones y caemos en lo banal e injusto -por no decir peligroso- de la descalificación no por hacer, sino por ser (y en esto da igual judío que cualquier otra etiqueta), entonces ahí me duele. Me duele de verdad.
Por ideas propias, sólo hay algo que odio más que las ofensas: ser yo quien ofende. Presumo de llevarme bien con toda la gente que conozco de comentar por la red, cuando menos tolerarnos, y si alguna vez he molestado creo que puedo afirmar que he sabido "acachar las orejas" antes que dejar a alguien excesivamente molesto conmigo. Así que yo sigo tu ejemplo, Antonio, y te pido disculpas de nuevo por lanzarme a criticar de forma quizá irreflexiva y seguramente desagradable tu artículo.
Si necesitas comentarme alguna cosa más, si no estás de acuerdo con lo dicho, o deseas cualquier cosa de mí, estoy a tu disposición vía mail, en antesforia (usuario de gmail y gtalk, el resto ya sabes, arroba punto com).
Un abrazo y shalom.
Apreciado Werewolfie:
ResponderEliminarNo sucede nada. He cometido una falta pensando, ingenuamente, que trasladaba, sin equívoco, una impresión extendida y convertida en realidad social que, sin embargo, poseen carga de insulto o, cuando menos, de desconsideración, hacia otras personas. ¡Son los riesgos de vivir en un Mundo Pequeño de un Pequeño Mundo!
En todo caso, gracias por tu comprensión.
Saludos,
Antonio Santos.
Se puede decir que el artículo de Santos (dejando a parte su calidad, que admiro sobre todo por su redacción, es la verdad), ha sido todo un éxito.
ResponderEliminarEn un blog que "todo el mundo" lee y "nadie comenta", es un triunfo leer un artículo con puntos de vista (no olvidemos este concepto) tan particulares (viva la anteriormente citada "pluralidad") para, además, continuar leyendo tan apasionante debate sobre el mismo.
Como siempre, he aprendido de todos y cada uno de los colaboradores y redactores de Tebeosfera, aunque es un privilegio aprender también de sus lectores y lectoras.
Salud!
Estimado Rafa-Fali:
ResponderEliminar¡Muchas gracias por tus palabras!
Continuaremos esforzándonos.
Saludos,
Antonio Santos.