El Berliner Mauer, o muro de protección antifascista fue construido en 1961 y derribado tal día como hoy de 1989, hace 20 años. Dividió Berlín en dos a la vez que dividía el mundo, simbólicamente, durante aquel período que se dio en llamar "guerra fría" y que, aparte de origen de miles de historias para el entretenimiento, ha servido para identificarnos como especie estúpida que permaneció todo un siglo, el XX, en guerra.
Y aún lo estamos. Porque hay otros muros.
Pero aquella caída de hace veinte años simbolizó muchas ilusiones y esfuerzos, porque se abría camino hacia un horizonte más libre y armónico. No lo ha sido tanto, como se puede comprobar, además de que con él cayeron un buen paquete de ideales, pero en su día fue celebrado con alborozo por editores e historietistas.
Citaremos, para recordar la efeméride, una colección que nació aquel año en su honor:
Y un tebeo, construido colectivamente para festejar el acontecimiento histórico:
Catalogaron Andrés Álvarez y Félix López.
Tebeosfera. Sin muros entre viñetas.
Viendo cómo, poco después de la caída del muro, Alemania no se reunificó sino que una Alemania absorvió a la otra, y viendo lo que pasó luego con la URSS y concretamente con Rusia... no sé, la caída del muro significó más libertad política, pero también significo la victoria de un sistema sobre otro, su imposición en ocasiones salvaje.
ResponderEliminar¿Verdad?
ResponderEliminarEs curioso como la realidad se manifiesta aplastante pero los símbolos siguen volando libremente...
¡Qué gran poder de convicción el de los medios de comunicación!
A mí me ha gustado mucho la síntesis iconográfica que hacía Moebius en este libro: el que destruye el muro es un hombre que busca abrir horizontes, pero ÉL ya forma parte de el muro...
No entiendo estas opiniones, y quiero andarme con respeto y cuidado porque la palabra escrita puede malinterpretarse: ¿había un tercer bando, más allá de Capitalismo y Comunismo, que imponer, o al cual abrazarse, o desarrollar? ¿La Guerra Fría no iba de eso: de que "sólo puede quedar uno"? ¿Ha ganado el bando (¡otra vez los bandos!) que no convenía...? Creo entender que la "Alemania del Oeste" (ergo: Occidente) absorbiese a la "Alemania del Este" (ergo: URSS) ha sido malo. Pero ¿a la inversa hubiera sido positivo? Occidente (ya sabéis: "democracia", internet, porno, DVDs...) es manifiestamente mejorable, y el capitalismo no es ninguna pera en dulce, pero ¿se prefiere lo otro? ¿Es eso? Iluminadme, os lo agardecería.
ResponderEliminarAntonio Santos.
Definitivamente NO. A la inversa NO hubiera sido positivo. El comunismo, como sistema económico, ya estaba desmoronado antes de que el Muro cayera en pedazos. De ahí mi indicación de la alegoría con el hombre/muro.
ResponderEliminarEl sistema que ha imperado es el capitalismo, sí, pero nosotros no hemos sugerido que fuera mejor o peor que el otro, sólo que cayeron los ideales y que el equilibrio pacífico mundial no existe.
Si quieres Buenos y Malos claramente identificados, amigo Antonio, vas a tener que recurrir a los seriales y a las pelis del Oeste...
:)
Gracias por tu aclaración.
ResponderEliminarSaludos.